Escuela financiera: el ratio de liquidez
En la categoría Escuela financiera, hablaremos periódicamente sobre un término financiero y de riesgo. Abrimos esta categoría con el Ratio de Liquidez:
El Ratio de Liquidez mide la capacidad que tiene una empresa de poder hacer frente a los pagos futuros a corto plazo. Este ratio se calcula tomando el activo corriente (activo circulante), dividiéndolo por el pasivo corriente (exigible a corto plazo) y multiplicándolo por 100 para obtener el tanto por ciento. Dicho ratio está vinculado al fondo de maniobra.
No tiene un valor ideal, ya que para realizar un diagnóstico acertado es necesario tener en cuenta el sector y su evolución histórica.
En un principio, si el resultado del ratio de liquidez es superior a 100 esto nos indica que los fondos permanentes están financiando el activo ordinario de la empresa. Del mismo modo, un elevado ratio de liquidez puede ser indicativo de activos ociosos lo que conlleva una pérdida de rentabilidad. Por el contrario, cabe pensar que si dicho ratio es inferior a 100 la empresa puede tener problemas de liquidez, aunque hay que matizar que esto depende del sector en el que opere la compañía y de las particularidades de éste último.
Caso práctico
Tomemos el ejemplo de la compañía Telefónica, S.A. cuyo ratio de liquidez es inferior a 100. Al ser el pasivo corriente es un 83% superior al activo corriente en el ejercicio 2007 y un 70% superior en 2008. Esto no significa que tenga problemas de liquidez, sino que se trata de un hecho diferencial de este tipo de empresas. En general, en el sector servicios, se suele cobrar prácticamente al contado mientras que el periodo medio de pago suele ser muy elevado (> 90 días). En el caso concreto de Telefónica, la empresa tiene un fondo de maniobra negativo, lo que inicialmente se podría interpretar como algo crítico en términos de liquidez, en la práctica, le permite obtener una mayor rentabilidad de sus recursos.